Alguna vez, cuando fui a su casa para saludarla, mi mamá se veía triste, cansada, preocupada. Al hacérselo notar, me respondió: Están pasando tantas desgracias, hijo, tantas. Personal, familiar y socialmente estamos enfrentando circunstancias que nos conmueven. Es decir, cosas que sacuden nuestro ánimo de manera violenta y brusca.
Es tal el impacto de tales experiencias que nos vemos animados a pensar que nunca había habido tanto sufrimiento en el mundo. Pero, dado que son muchas las evidencias de que esto no es así quizá el impacto de lo que vivimos responda más a nuestra cosmovisión que a los hechos que enfrentamos.
(más…)
Comentarios